Angelfish: Angelfish 26 aniversario

Por Alejandro Martín del Campo Glez.

A lo largo de la historia de la música contemporánea del siglo XX hemos escuchado diversas manifestaciones musicales con variopintos elementos sonoros, algunas bandas longevas, otras muy efímeras, unas cuantas mutando su sonido a través del tiempo o por medio de los cambios en su alineación; también hay coyunturas distintivas de artistas específicos que dejaron una marca preponderante por una permanencia lacónica dentro de otras agrupaciones, y tal vez ésta sea la peripecia del proyecto musical de Angelfish, que en aquel periodo entre 1993 y 1994 estuvo conformado por Shirley Manson como vocalista, acompañada de Martin Metcalfe en la guitarra, Fin Wilson en el bajo y Derek Kelly a cargo de la batería. Todos estos personajes se reinventaron en este ‘nuevo’ esbozo bautizado como Angelfish, antes conocido como Goodbye Mr. Mackenzie.

De Goodbye Mr Mackenzie a Angelfish
Tras diversos disentimientos entre el sexteto escoces de rock Goodbye Mr. Mackenzie y el sello discográfico MCA Records, los primeros deciden por aplazar dicho grupo con la finalidad de provocar la disolución de la relación laboral con la empresa discográfica. Mientras, en una historia equidistante deciden renovarse en su alineación ahora bajo el nombre de Angelfish, siendo éste una especie de proyecto alterno al primer grupo mencionado para soterrar los anales de la hoy extinta banda Goodbye Mr. Mackenzie.

Para el 8 de junio de 1993 Angelfish publica el EP Suffocate Me, que comprende 4 canciones, de las cuales resaltan un par de covers: el primero es el interesante tema You Can Love Her de la multi-instrumentista-experimental Holly Beth Vincent; el segundo es Kimberly, que es original de Patti Smith del álbum Horses del año 1975. Aunado a este evento se lanza en paralelo el video que le da epígrafe al EP Suffocate Me, en el que se muestra por primera vez a Shirley Manson como vocalista central de una banda, ya que con Goodbye Mr Mackenzie ella solo ocupó el puesto en segundo plano de corista y tecladista.

Angelfish
El CD sale a la venta en febrero de 1994. Éste resulta un LP bien equilibrado con 10 canciones y casi 35 minutos de duración, mismos que develan un sonido sesudo más pegado al dream pop con influencia del rock alternativo de matices oscuros e influjo mesurado al shoegaze. Todo este sonido se transmite sin fallas por las atrabiliarias-nostálgicas y melódicas guitarras de Martin Meltcafe, mientras que la batería de Derek Kelly suena con gravedad y mesura durante el desarrollo del álbum, la ejecución del bajo de Fin Wilson es siempre constante con la intención de terminar de reforzar los ambientes creados por la enérgica, melancólica y lóbrega voz de Shirley Manson a lo largo del LP.

El álbum comienza con la vehemente y lascivia Dogs in a Cage, en la cual la música y la letra nos puede hacer evocar el pensamiento de una dupla de personas en medio de un acto de fruición carnal que transgrede los límites de la aquiescencia de Dios, y es que la sensual voz de Manson así lo expresa:

I feel your bones and you feel so sinful / Feel your back and you feel so simple / Feel your legs and your hands and your hips and / Feel your thighs and your back is twisting. Después pasamos al claustro del amor bien plasmado en Suffocate Me

Donde escuchamos las cuerdas del bajo vibrando en tonos graves, mientras la guitarra suena en su talante oscuro, y entre tanto Shirley narra el sentir de alguien ante un amor que se aferra, martiriza y sofoca con cierta complacencia masoquista a cada momento: I love you / You know I do / Suffocate me. Posteriormente se escucha la canción You Can Love Her, que hasta ese momento era una versión inédita de la genial Holly Beth Vincent y que Angelfish la hace parecer como una especie de tragedia gótica.

En este punto el álbum da un giro discreto y ahora empieza a fluir en piezas melancólicas, nostálgicas y suplicias, ya que prosigue con King of The World, Sleep With Me y Heartbreak to Hate. En la primera, por medio de las guitarras podemos encontrar ese destello del género new wave en conjunto con un golpeteo constante de la batería durante toda la canción que resulta maravilloso para el receptor por su armonía sonora; también nos habla acerca del plañido por el recuerdo de un amante que ya no está en ese tiempo y espacio, subraya en el imaginario íntimo de quien la canta que si fuera ‘el rey del mundo’ daría todo a esa persona por no sentir ese suplicio en el corazón:

I wish I was king of the world / I’d give you everything, diamonds and pearls / Yeah, I’d give you all that I had / Yeah, when I’m king of the world.

El segundo título es una balada de desamor que cuenta una ruptura sentimental y que posee un sentimiento de arrepentimiento en los actos hechos por la protagonista, sumando la idea de hacer una invitación abierta por la necesidad de tener a esa persona reposando todas las noches a su lado; su letra nos lo revela:

Some things are dead and buried / Some things are dead and gone / But you / Stay with me / Sleep with me / Dream of me.

Después sigue el tercer tema, de inclinación al rock alternativo de balada predominante de esos momentos de los 90s; antepone la percepción del corazón roto, la desilusión amorosa, el rompimiento de la idealización del amor en pareja, y cómo en cuestión de poco tiempo se puede llegar al odio sin retroceso ante la situación, pues el corazón está roto:

How long before I make sense of this? / How long before I forget your kiss? / How long did we take from heartbreak to hate? / From heartbreak to hate.

Entrando en la recta final del álbum se devela el sonido de The Sun Won’t Shine, que continúa con esta cinemática de tragedia sonora, pero que también funciona como una melodía para empezar a sacarnos a flote del drama en el cual la banda está sumergida gracias a los versos de Shirley Manson. Este tema nos describe por medio de una metáfora la petición frustrada de la intérprete hacia otra persona sobre el cambio de ciertos actos o decisiones que la pueden ayudar a dar ese calor y brillo que a través de los rayos del sol se puede percibir para quitar la precipitación y tristeza por la cual está pasando, y lo hace con una rotunda advertencia: “si no cambia, todo se acaba”. Posteriormente pasamos a Mummy Can’t Drive, que nos vuelve a levantar el ánimo, pero ahora dentro de una historia más psicodélica y excesiva, donde por medio de la voz enérgica de Manson se nos cuenta sobre una madre de familia que no puede manejar por el exceso de alcohol y drogas, mientras su hijo sufre las consecuencias de esto. Este tema en particular está inspirado en una anécdota que la banda vivió en un bar escoces, una mujer al borde de la histeria y de los estupefacientes les platica su ‘hazaña’. Proseguimos con las últimas canciones, que son Tomorrow Forever y The End, otro par de baladas que denotan que la historia de tormento de la que tanto habló Shirley Manson a lo largo del disco está por finalizar, y así es, porque el álbum cierra con The End, que es el inevitable colofón de un romance sonoro.

La inspiración del pez ángel
El nombre de la banda proviene de una anécdota, la cual supone a Shirley Manson a la edad de 10 años recordando que su familia que tenía una pecera con una ‘familia’ de peces dorados, todos murieron a causa de una enfermedad a excepción de uno, por lo que nuestra protagonista se atrevió a sacarlo del agua y dejar que muriera para que el pez pudiera estar de nuevo con su ‘familia’; esto la lleno de inspiración para el nombre de la banda como Angelfish en una especie de metáfora de un pez ángel.
Cabe destacar que para la producción del álbum convocaron a Chris Frantz y Tina Weymouth, ambos co-fundadores junto con David Byrne de la mítica banda de post-punk Talking Heads; Frantz y Weymouth (ambos casados) ya habían colaborado anteriormente con grupos como los Unhappy Mondays y Ziggy Marley and the Melody Makers, dichos productores ayudaron a que la banda pudiera renovar su sonido manteniendo la dirección del proyecto sin perder su sonoridad, además de contribuir a dar el sello de autenticidad, identidad y oscuridad sonora que Angelfish tiene en este primer y único álbum.

De Angelfish a Garbage
Después de la salida del video Suffocate Me en el subterráneo programa 120 minutes de MTV que fue celebre por mostrar bandas con propuestas no tan populares, los futuros integrantes y productores musicales Butch VigSteve Marker y Duke Erikson, llamaron a Radioactive Records para contactar a Shirley Manson, en esta ocasión haciendo una invitación abierta para formar parte de Garbage y sucesivamente en 1995 sacar el primer LP homónimo. Mientras, el proyecto Angelfish quedó varado en el recuerdo del tiempo y sus integrantes trataron de continuar con Goodbye Mr. Mackenzie, pero el proyecto fracaso, ahora transformándose a Isa & The Filthy Tongues, todavía vigentes con una propuesta bastante interesante.

The End
Como escribí en un principio acerca de las diversas variantes en el comportamiento de las bandas respecto al género musical que podemos encontrar en la escena de cualquier década, los cambios de sonido o la personalidad de algún integrante pueden ayudar a modificar el rumbo de la historia de una agrupación; Shirley Manson como figura central de Angelfish con su imponente carisma e icónica voz conjugada con los sonidos aportados por Martin Metcalfe, Fin Wilson y Derek Kelly, llegaron a estar cerca del éxito de la fama sonora dominante de los 90s, pero el giro en la carrera de Manson convierte a Angelfish en la antesala de una trayectoria en constante ascenso, no por eso menospreciada, cuando, al contrario, es muy brillante y perspicaz en cuanto a la riqueza aportada en su sonoridad.

El disco, en su contexto general, parece una especie de presagio del mismo proyecto que inicia con furia, deseo y energía, y termina en un desenlace apesadumbrado de no retorno jamás; así es como podemos describir el proyecto Angelfish de acuerdo con su efímera semblanza. El LP expone una serie de micro relatos cotidianos que nos detallan temas como la aflicción sentimental, el abatimiento provocado por las lesiones amorosas, la concupiscencia pecadora de los deseos carnales, en conjunto rememora escenarios reales como quiméricos, desde los enamorados eviternos hasta el odio absoluto o la asfixia que provocan las relaciones enfermizas, todo esto por medio de la percepción lirica de Manson y la música bien plasmada por la banda.

Angelfish, en su sonido, nos hace entender los rumbos artísticos de la vieja Escocía durante la década de los 90s con influencias del rock alternativo, el shoegaze o dream pop, todo en uno, lo cual bien nos sirve para apreciar los rumbos de la música de aquella época y que hoy están presentes en la infinidad de exponentes actuales que siguen tomando esta dirección mediante una formula semejante tratando de evocar la caótica última década del siglo pasado.

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Alejandro Martin del Campo Glez.

Nación Alternativa bandas nacionales en movimiento.

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