“LA VOLADORA” por Elena
Esta historia le pasó al amigo de un amigo. Cuenta que todo sucedió una noche de invierno. Toluca se encontraba con un clima muy frío y había mucha neblina. El taxista viajaba hacia su casa cuando dos hombres le hicieron la parada, pidieron viaje a Camino Viejo Ocotitlán, y pasando por terrenos baldíos los señores le rogaron al conductor que acelerara la marcha. El taxista preguntó por qué… y David y Alejandro con miedo se abrazaron y pidieron que fuera más rápido.
Al pasar las milpas los viejitos le contaron su historia:
—Hace muchos años a nosotros nos gustaba beber mucho, no llegar temprano a casa y no pasábamos tiempo con la familia. Un día, al regresar de una cena pasamos por el camino viejo e íbamos cantando y bebiendo sin imaginar lo que nos pasaría esa noche. David conducía lentamente porque la neblina no dejaba ver la carretera, cuando de repente sentimos que golpeó algo y rebotó en el techo del auto. Cuando volteamos a las ventanillas vimos unas manos con uñas muy largas que se sostenían de cada ventanilla. Al voltear hacia enfrente para seguir nuestro camino vimos una cara descarnada con cabello largo y mechones blancos. David y yo empezamos a rezar, perdimos el control y el conocimiento hasta que nos dimos cuenta de que estábamos en casa sanos y salvos.
El Sr. Fred rió incrédulo al escuchar la historia y semanas después no se imaginó lo que le pasaría… Cuenta el amigo que ese amigo taxista que él viajaba hacia su casa para ir a cenar, descansar y trabajar más tarde, pero él tenía un problema, como decía la tatarabuela “era de cascos ligeros” Él vivía entre Toluca y el camino viejo a Ocotitlán. Pasando por el camino viejo vio a lo lejos a una mujer muy hermosa que cruzaba la calle, y pensó: “la llevaré a su casa”. Cuando pasó junto a ella tocó el claxon y al voltear la mujer ya estaba descarnada, flotaba y tenia las uñas largas y el cabello negro con mechones blancos. Perdió el conocimiento, llegó a su casa y durmió. Al día siguiente contó su historia y se convirtió en mito.
De esta narración a lo largo de los años se rumoraba que esa mujer se seguía apareciendo por las calles y se decía que ella había muerto ahogada en un río que colindaba con el camino viejo a Ocotitlán.
ELENA
10 AÑOS
TOLUCA, ESTADO DE MÉXICO