The Smashing Pumpkins: Machina/The Machines of God. (20 aniversario)
Por Alejandro Martín del Campo Glez.
Invocar el nombre de The Smashing Pumpkins es invocar 4 iconos de la música contemporánea, Billy Corgan, James Iha, Jimmy Chamberlain, D’arcy Wretzky, junto con Melissa Auf Der Maur, ex bajista de Hole y sucesora de Wretzky. Estos personajes, en automático, nos remontan a uno de los tantos pilares de la historia del rock alternativo con más éxito y creatividad durante la década de los años 90, un grupo que su música fue para muchos parte de la banda sonora de sus vidas, con varios temas reconocidos a sonar, y que durante esa década nos dieron diversos discos brillantes como Gish, Siamese Dream, el obligado de citar y el clásico-popular y bien reverenciado Mellon Collie and The Infinite Sadness; pero se ha dejado de lado Machina/The Machines of God.
De Adore a Machina
El álbum Adore de 1998 muestra un lado electrónico y oscuro, donde hay un vacío dejado por el baterista Jimmy Chamberlain que fue despedido antes de la grabación. El resultado de esto se vio reflejado en las críticas del público diciendo que para muchos es una decepción y para otros una joya dentro del catálogo del cuarteto. El afán de Billy Corgan, por evolucionar, da un ‘último asalto’ para recibir el nuevo milenio con entusiasmo en una inventiva artística un poco ‘diferente’ y más conceptual que podría resultar bastante refrescante para la banda.
El Interludio de Machina
Los eventos se fueron acomodando de tal forma que Billy Corgan tenía de nuevo dentro de sus filas a Jimmy Chamberlain en la batería, a James Iha en la guitarra y a D’arcy Wretzky a cargo del bajo; ya con todo listo el álbum empieza a ser grabado en noviembre del año 1998, pero en 1999 a mitad de la grabación del disco vuelven los problemas, en esta ocasión entre Billy y D’arcy, ya que ésta decidió dejar el grupo, o bien fue despedida por Billy argumentando ‘incapacidad creativa’. Esto provocó una pequeña y significativa ruptura entre los fans y The Smashing Pumpkins, resultando en que Corgan grabara las pistas correspondientes del bajo de Wretzky en el álbum, pero ella argumenta lo contrario.
El LP, que en un principio sería en su totalidad un álbum conceptual, estaría conformado por dos partes, Machina I/The Machines of God y Machina II/The Friends & Enemies of Modern Music, pero, al final, sacar un álbum-doble-conceptual en una misma producción no resulto atractivo para la disquera debido al fracaso en ventas del predecesor Adore (que casualmente en el año 1999 ya era un disco de platino); esto causó que se lanzara en dos tandas diferentes cada parte, perdiendo la genialidad que Corgan quería plasmar en este trabajo.
Descifrando Machina/The Machines of God
Machina/The Machines of God se terminó en octubre de 1999 y fue lanzado a nivel mundial el 29 de febrero de 2000. El álbum está plagado de baterías con excelente ejecución, guitarras distorsionadas, sintetizadores y teclados, sin resaltar el bajo como en otros trabajos; tenemos entonces un proyecto complejo, sombrío y teatral con letras que se entremezclan con angustia, ironía, melancolía y los pensamientos ensimismados de Billy Corgan, lo que nos da un disco con sonidos industriales, acústicos de rock, balada y pop que bien podría ser la suma de sus predecesores en un solo álbum.
El folleto del disco fue hecho por el artista ruso Vasily Kafanov. En la portada se aprecia una copa con forma de útero y en él un sacrificio, dentro del útero están los eviternos amantes del Génesis, Adán y Eva, o Glass y June en caso de esta obra, este es un ejemplo de la dicotomía hombre-mujer al estar cada uno a su lado, con las manos hacia arriba, con el Sol y la Luna; también encontramos un triángulo del lado izquierdo que representa a la Santísima Trinidad, en el centro del triángulo está el Tetragrámaton, esto es, las letras IHVH que son el teónimo de Yahveh. Todos estos personajes están atestiguando una unión alquímica de amor puro. De la misma manera, a lo largo del folleto del álbum encontramos claras referencias de hermetismo, misticismo, astrología y semiótica, con el afán de contar parcialmente una historia libre acerca de los personajes Glass (Billy Corgan),vocalista y líder de la banda imaginaria de The Machines Of God, y June, a la cual busca Glass como su ‘amor perfecto’. Todos los símbolos y referencias podrían estar haciendo alusión a una sucesión de sueños que tiene Glass/Billy a lo largo del álbum y que describen alegóricamente el ascenso y descenso de The Samashing Pumpkins/The Machines of God, desde el inicio hasta el final de una manera dramatizada.
Todo este voluminoso concepto sería aterrizado a una serie animada que llevaría el título de Glass and The Machines of God, que también seria llevado al lejano internet–dial-up de aquel momento y hasta un videojuego que propondría Sony a Billy Corgan.
Machina/The Machines of God
El álbum abre con tres excelentes temas que son The Everlasting Gaze, Raindrops + Sunshowers y Stand Inside Your Love: el primero inicia con el ‘ruidoso’ y frenético riff de la guitarra de Corgan entonando la letra “You know I’m you know I’m not dead”; en el segundo hay una fresca melodía más pegada a un electro–dream–pop bien logrado por la adaptación de los sintetizadores, aderezado con el peculiar golpeteo de la batería, esto nos hace imaginar como si el personaje tratara de caminar bajo las gotas de la lluvia intentando hacer algo imposible, y en es que su letra nos lo afirma “Rain falls on everyone / The same old rain / And I’m just trying to / Walk with you / Between the raindrops”; y en el tercer título escuchamos una canción más pegada a la balada del rock alternativo con una letra hermosa, donde nos narra una historia de amor, que pareciera dedicada a una musa inalcanzable (posiblemente June) en el cual escuchamos en el coro “Who wouldn’t be the one you love / Who wouldn’t stand inside your love”.
Mientras el LP ‘gira’ nos encontramos con I Of The Mourning, que es un tema muy personal sobre Corgan, pues parece que está relacionado a la perdida de alguien (tal vez su madre) y que en la música sigue encontrando la felicidad y consuelo que él necesita. Luego pasamos a The Sacred and Profane, que continua con el misticismo lírico futurista de Billy y que bien puede representar el espíritu del álbum. Pasamos a Try, Try, Try, una balada de género más pop con algunos elementos de rock alternativo que son indicativos del sonido que los Pumpkins encontraron en este nuevo milenio.
En este punto nos encontramos a la mitad del disco, conformado por Heavy Metal Machine, This Time y The Imploding Voice. El primero viene siendo el tema que parte al disco en dos y que a pesar de ser ‘heavy’ con un riff pegadizo conjugado con un drone ‘monolítico’ se queda corto respecto al título del tema. El segundo parece un presagio de que una banda se está ‘desmoronando’, pero que resulta muy accesible en cuanto a su sonido. El tercero es una canción que podría sonar básica, pero que muestra un pequeño destello del concepto del álbum: Dios hablando con Glass por medio de la radio. También nos deja una incógnita abierta: ¿en la parte de esta canción donde cantan “Phase unwound / By yourself / Atom bomb / On the shelf unsung / Pause of light / Pulse of life / New face dawns”, especialmente en la palabra unsung, es la voz de D’arcy Wretzky,que se escucha más claramente en la palabra unsung? De ser verdad esto, sería la última voz que grabo la legendaria bajista Wretzky para los Smashing.
Conforme el disco avanza escuchamos Glass and The Ghost Children, que con casi 10 minutos de duración es uno de los temas más robustos, interesantes y experimentales que tiene el disco. Nos ayuda a entender otra parte del concepto de la inventiva original de la banda imaginaria de Glass, que The Ghost Children son los fans expulsados por Dios de The Machines of God, y que en la parte intermedia Corgan está hablando con su terapeuta. Después oímos Wound, que es una canción de alta sensibilidad o ‘una más’ de las baladas dentro del catálogo del grupo. Posteriormente escuchamos The Crying Tree of Mercury,que es otro de los ‘miles de mundos’ del personaje Glass, de corte industrial-oscuro y que da una sensación de entrada a un estado de depresión, y es que en su letra exclama
“This is the song I’ve been singing my whole life / I’ve been waiting like a knife / To cut open your heart / And bleed my soul to you”.
Los últimos tres tracks, para finalizar el LP, nos dan la sensación de que una llama que ‘se está extinguiendo poco a poco’, y es que cuando escuchamos la hermosa With Every Light, Blue Skies Bring Tears y Age of Innocence, nos hacen entender el desgarrador sentido de esperanza, luminosidad, resignación y melancolía de una banda que está llegando al final profesional y personalmente, ya sea en la representación de Glass and The Machines of God o bien la propia historia de The Smashing Pumpkins.
Machina, sacro y
profano
El álbum finalmente fue lanzado en febrero del 2000 y cuenta con la
mezcla de audio de Alan Moulder y la co-producción de Mark Ellis ‘Flood’; ambos han
trabajado con bandas como Placebo, Nine Inch Nails o Gary Numan; tiene también la participación de Mike Garzon (tecladista
de David Bowie) que tocó el piano para la canción With every Light. La portada y el arte del álbum fueron por parte
del pintor e ilustrador ruso Vasily Kafanov, que les valió una nominación
al Grammy en el año 2001 por el
mejor cover art.
Los videos The Everlasting Gaze y Try, Try, Try fueron ambos dirigidos por Jonas Arkelund. En el primero se muestra a la banda en una ‘tocada’ y es el primer video donde aparece la ya suplente de la bajista D’arcy Wretzky, Melissa Auf der Maur; mientras que el segundo es un cortometraje que habla de la fuerte situación de la adicción por las drogas.
El video de Stand Inside Your Love está, literariamente, bajo el lumen de Oscar Wilde en la obra Salome y, visualmente, bajo el de Aubrey Beardsley, que hizo la ilustración para la primera edición de dicho libro, y que es una fuerte influencia para elaborar la historia de amor y tragedia que se muestra en el video, y que bien puede ser el que más representa el proyecto de Glass and The Machines of God
Para el año 2000 la banda sale de gira y todas las líneas del bajo en vivo fueron tocadas por Melissa Auf der Maur, ex integrante de Hole; el nombre de la gira fue Sacred and Profane Tour, y durante ésta Billy Corgan anuncia la disolución de la banda.
Machina en el
tiempo
Machina es un álbum de textura sonora post-apocalíptica con una
clase de modernismo noveau medieval
amalgamado con el rock opera conceptual,
con distopías de ciencia ficción, entre historias de una tripulación que se expuso
al abuso de drogas, soledad, amor, y a muchos sentimientos; más que un LP
conceptual se interpreta como un disco que, canción tras canción, muestra la
suerte de la banda a lo largo de su historia, entre el año 1988 y el 2000,
dramatizada por Glass and The Machines of God.
El LP resulta complejo a su entendimiento, hay que tenerle paciencia, pero sobre todo disfrutarlo sin prejuicio de los demás álbumes que ha tenido The Smashing Pumpkins. Si bien puede ser una extensión o recopilación de sus demás trabajos en un solo LP, Machina es una clara muestra de la megalomanía de Billy Corgan al elaborar discos que pueden estar bastante enriquecidos desde la lírica, el arte pictórico y la música, resultando en extensas obras de estos.
También podemos apreciar en este trabajo que la salida de D’arcy Wretzky deja un vacío artístico, deja al proyecto sin la personalidad de un integrante, misma que Corgan no puede llenar y que está presente en los demás álbumes como un balance de dulzura, agresividad e intelecto femenino bien mostrada en la banda.
A la largo del tiempo se ha hablado de un relanzamiento del álbum en su concepción original y con el orden cronológico que las canciones deberían tener, con todo el material que se cortó que es más experimental que el que se mostró, pero nada parece haberse aterrizado para efectos positivos en estos últimos 20 años desde su nacimiento. Parece ser que este proyecto va más allá del tiempo y del espacio, que aún nos tardaremos en ver y escuchar cabalmente todo el voluminoso concepto de Machina/The Machines of God o bien Glass and The Machines of God o mejor dicho Billy Corgan and The Smashing Pumpkins.
“I want to live / Don’t want to die
Glass and The Ghost Children. En Machina/The Machines of God.
I want to live / I want to try
All in prayer / Prayer in all
All are scared / Scared of all”
The Smashing Pumpkins. (2000).
EUA.: Virgin Records America
